La podología es la especialidad médica que estudia y trata del cuidado de los pies, incluyendo su anatomía, enfermedades y tratamiento médico quirúrgico para las enfermedades más graves.
Patologías que tratamos en el Centro Médico Sanitas Montecarmelo
- Pies planos: se produce cuando uno o varios arcos del pie se han reducido o aplanado. No suele ser doloroso, pero a veces puede aparecer dolor en el tobillo, en el pie o en la parte inferior de la pierna.
- Tendinitis de talón: esta patología consiste en la inflamación del tendón de Aquiles.
- Fascitis plantar: es la inflamación del tejido grueso que se encuentra en la parte inferior del pie. Este tejido conecta el calcáneo (hueso que forma el talón del pie) con los dedos, creando el arco del pie. Es una afección muy dolorosa que puede causar complicaciones a la hora de caminar. Por lo general, se detecta por el dolor y rigidez de la parte interior del talón.
- Úlceras diabéticas: las personas diabéticas tienen mayor riesgo de padecer úlceras o llagas en los pies. Estas úlceras a menudo son indoloras, por lo que es sumamente importante el examen regular de los pies.
- Artritis: la artritis es una enfermedad que ataca a las articulaciones, ocasionando deformaciones. Generalmente, las personas que padecen artritis reumatoide desarrollan síntomas en los pies y tobillos.
- Onicomicosis: No es una enfermedad que cause dolor, se caracteriza por el amarilleo de la uña, aunque puede producir su rotura o descamación produciendo engrosamiento y dificultad para andar o llevar zapatos.
- Juanetes: Cuando el dedo gordo rota en dirección al resto de dedos se produce una deformidad en el hueso. Tiene un componente hereditario, aunque el uso de zapatos estrechos y de tacón alto favorece su aparición.
- Uñas encarnadas: Aparecen cuando la uña del pie se “entierra” dentro de la piel del dedo. Los principales síntomas son enrojecimiento, hinchazón y dolor. En muchas ocasiones, si no se trata a tiempo, puede producir infecciones.
- Fracturas óseas: Un mal cuidado de los pies, malas posturas, calzado inadecuado, realización de ejercicio excesivo, etc., pueden ser causa de una rotura de los dedos o de las articulaciones.
Pruebas diagnósticas
Generalmente, nuestros podólogos solicitarán las pruebas más adecuadas para el diagnóstico en cada caso. Las más habituales son:
- Exploración: Un examen realizado por el médico, en muchos casos, podrá arrojar un diagnóstico sobre la forma del pie, el caminar, las manchas, las verrugas, el dolor al tacto, el color, etc. Sin embargo, en otras ocasiones se necesitarán pruebas complementarias para confirmar o descartar un diagnóstico.
- Pruebas de imagen: a través de las pruebas de imagen se podrá determinar el alcance de la lesión del pie: radiografías, muy útiles para detectar artritis; tomografía computarizada para los huesos; o resonancia magnética para los tendones.
Tratamientos
- Cirugía: Si la patología del pie es traumatológica, el tratamiento más habitual es la cirugía, como por ejemplo la reparación de tendones, deformaciones de los pies (juanetes), extirpación de quistes o eliminación de verrugas.
- Hábitos saludables: Unos hábitos adecuados a la patología del paciente pueden prevenir posibles enfermedades o mejorar los síntomas actuales.
- Cuidados del pie: Son muy importantes si se tiene alguna enfermedad como la diabetes. Por ejemplo la limpieza, el corte de las uñas de forma adecuada, utilizar zapatos cómodos, etc.
- Dieta: Los pies soportan durante muchas horas todo el peso del cuerpo. Una dieta adecuada y evitar el sobrepeso es una buena fórmula para prevenir enfermedades.
- Ejercicio: Si regularmente realizamos ejercicios de estiramientos de los pies, mantenemos una postura corporal correcta y movemos los pies de forma correcta, tendremos unos pies sanos.
- Frío: Cuando los pies están inflamados, por la razón que sea, los paños de agua fría o hielo ayudan a reducir el problema. Igualmente, existen cremas destinadas a reducir la inflamación de los pies o hidratarlos correctamente.
- Medicación: El tratamiento farmacológico puede incluir analgésicos o antiinflamatorios para calmar el dolor; antibióticos para las infecciones; corticoides; cremas reparadoras; etc.
- Ortopedia: En ocasiones, es necesario el uso de materiales complementarios especiales que ayuden a mejorar los síntomas o bien a prevenir las enfermedades.
- Fisioterapia: El médico puede recomendar la asistencia a estas sesiones para reducir el dolor o para ayudar a la adquisición de hábitos más saludables.
En el Centro Médico Sanitas Montecarmelo puedes asistir a la consulta del podólogo si presentas alguno de los síntomas o padeces alguna de las enfermedades descritas. Nuestros especialistas te harán todas las pruebas diagnósticas necesarias para definir el tratamiento más adecuado y realizarán el seguimiento evolutivo de tu enfermedad.
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